Esta especie fue encontrada en las cercanías de las islas Malvinas y lo que más llamó la atención de los investigadores fue el impresionante largo del pene erecto del animal, el cual alcanza los 67 centímetros, siendo casi del mismo porte que el cuerpo.
El hallazgo entrega nuevos antecedentes acerca del apareamiento de este molusco que hasta el momento era prácticamente un misterio para los científicos.
Cabe destacar, que en este tipo de cefalópodos la forma del cuerpo es un obstáculo para la procreación. Por este motivo hay algunos que poseen un brazo copulador con el que inseminan a la hembras, pero en el caso del calamar de aguas profundas esta extremidad modificada no existía.
Es así como ahora se logra dilucidar que este pene supliría la función del brazo especial que tienen otras clases de calamar, según explicó Alexander Arkhipkin, miembro del Ministerio de Pesca de las islas Malvinas en declaraciones recogidas por La Vanguardia.
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